¿Tengo ya la atención de todo el mundo? ¿Me leen ya los que se regodean con la desgracia ajena siempre y cuando justifique sus argumentos? Vuelve a circular la noticia de Caroline Lovell y su muerte...Y estoy harta, así que voy a depositar aquí todo lo que me gustaría decirle a cada una de las personas que siguen contaminándolo todo contagiando ignorancia como el peor de los virus. Mi tercer parto fue en casa como el segundo, y aunque no estuve tan cerca de la muerte como dice mi titular, propio del 2015 donde lo que importa es el titular y no la información, si que sentí por primera vez tras tres partos estupendos que existía esa posibilidad. La razón, sospecho que fue que mi útero se volvió atónico (no contraía, algo relativamente normal) y tuve una pequeña hemorragia que nos dio un susto. Por mi trabajo y por haber presenciado hemorragias de este tipo (siempre en partos hospitalarios) reconozco que me asusté. Tres cosas vinieron rápidamente a mi cabeza, una de ellas fue Caro...
La feminista que hablaba de partos. La madre que hablaba de feminismo. La espectadora madre y feminista.