Skip to main content
Una denuncia de malos tratos y una cuestión de genero

Qué ocurre cuando el maltrato y el abuso proviene de una institución. Este es el caso de Habiba, una madre marroquí y su bebé de quince meses ambos han sido separados mientras se encontraban bajo el amparo del Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF).

En un principio se les impuso la interrupción de la lactancia yendo así contra las recomendaciones de la OMS y Asociación Española de Pediatría y tras apartar a esta madre de su bebé sin decirle a donde iba ni darle tiempo a despedirse se la echó de dicho centro por no ser madre con un hijo.
Venga de donde venga este trato, es secuestro, es abuso y es tortura. Privar a una madre y a un bebé del contacto físico, de la lactancia establecida y el amor me parece uno de los más aberrantes e inhumanos tratos que cualquier ser humano pueda padecer, sabemos lo suficiente sobre las necesidades físicas y afectivas de los bebés y del vinculo materno filial y su impacto en la salud física y mental como para entender que lo que Habiba y su bebé experimentan es denunciable y necesita ser corregido con urgencia.
La última vez que oí algo comparable había ocurrido en los campos de exterminio durante la Segunda Guerra Mundial. Esto ha ocurrido en Madrid, en democracia y en el 2011.
El miedo no existe cuando una madre te acompaña, y Habiba y su hija tendrán tantas como hagan falta hasta que por fin se vuelvan a encontrar.

Todas las madres somos Habiba.

Por favor únete, no calles ante la injusticia.

Puedes copiar esta carta o escribir tu propia queja y enviarla a las siguientes direcciones:t



Gracias
Una denuncia de malos bGRerrantes e inhumanos

Estimado/a Sr./Sra.

(Elegid el principio de la frase "Como mujer, madre, padre, ciudadano, etc...") estoy informada de las recomendaciones de la OMS y la Asociación Española de Pediatría sobre lactancia materna y las promuevo y apoyo. En la página web de la Asociación Española de Pediatria se establece que:

"La leche materna es el mejor alimento que una madre puede ofrecer a su hijo recién nacido. No sólo considerando su composición sino también en el aspecto emocional ya que el vínculo afectivoque se establece entre una madre y su bebé amamantado constituye una experiencia especial, singular e intensa. Existen sólidas bases científicas que demuestran que la lactancia materna es beneficiosa para el niño, para la madre y para la sociedad, en todos los países del mundo."

Y tras citar otras muchas razones de peso para proteger y promover la lactancia materna también se dice:

"Por todas estas razones y de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Academia Americana de Pediatría (AAP), el Comité de Lactancia de la Asociación Española de Pediatría recomienda la alimentación exclusiva al pecho durante los primeros 6 meses de la vida del niño y continuar el amamantamiento junto con las comidas complementarias adecuadas hasta los 2 años de edad o más."

Hoy llega a mi conocimiento a través de una popular red social, la noticia de que una madre marroquí, Habiba, al encontrarse en una situación económica adversa y solicitar acogida al Instituto Madrileño del Menor y la Familia, ha sido forzada a interrumpir la lactancia establecida con su hija de 15 meses, separada de su hija y posteriormente por "carecer" de hija que le permitiera conservar su sitio en este centro, puesta en la calle.

¿Qué supone esto?

Pues sin entrar en el tema de lo cuestionable que sea la autoridad de esta u otra institución para a) arrebatar a un niño/a lactante de los brazos de su madre y b) imponer la interrupción de la lactancia.

Supone un daño físico, a la madre en forma de mastitis porque el ritmo de producción de su leche ha sido alterado de manera externa, a su hija porque la lactancia tiene beneficios demostrables al menos hasta los dos años de edad y porque el desarrollo neurológico que está en pleno desarrollo hasta los tres años formando el cerebro futuro, se ve profundamente marcado por este vinculo afectivo.

Copio aquí información de la página de UNICEF:


"Es un hecho ampliamente reconocido que el tiempo que media desde el nacimiento hasta los dos años de edad constituye la "ventana crítica" para promover la salud, el crecimiento óptimo y el desarrollo conductual. Así pues, durante esta época es fundamental la buena alimentación del lactante y del niño y niña de corta edad. Una buena alimentación del lactante y el niño o niña de corta edad significa enseñar a las madres a iniciar la lactancia materna a la hora siguiente de dar a luz, a emplear la lactancia materna como método exclusivo de alimentación durante los seis primeros meses de vida del bebé, y, a partir del sexto mes, a continuar con la lactancia materna durante dos años o más, en combinación con una alimentación complementaria apropiada, eficaz, segura y adecuada a la edad del niño o niña. La nutrición materna también es importante para asegurar el buen estado nutricional del lactante y para salvaguardar la salud de las mujeres."

Supone un daño emocional, la madre y el bebé están "programados" para proteger y ser protegido respectivamente, a Habiba y a su hija en esta situación se les ha arrebatado esta posibilidad y necesidad.

Para ambas esto tiene consecuencias psicológicas, tal y como cita la Asociación Española de Pediatría...

"En cuanto al final del destete, casi todos los autores están a favor a que se haga de forma lenta, por miedo a que un final brusco provoque traumatismos o sentimientos de inseguridad...En los lactantantes mayores la lactancia tiene una parte afectiva, otra nutritiva y otra de hábito. Dejar de dar el pecho no significa cortar la relación con su madre, que sería lo auténticamente traumático..."

Y supone un daño social, la promoción y protección de la lactancia tiene un impacto en la salud a nivel social, si las instituciones no siguen las recomendaciones para proteger la salud de madres y lactantes ¿qué clase de mensaje de protección de la salud se está transmitiendo?

¿Qué impacto tiene esta actitud en la salud pública?

UNICEF indica en su estrategia global para la alimentación del lactante y el niño que:

"La estrategia y las actividades de UNICEF en apoyo de la alimentación del lactante y el niño pequeño subrayan la importancia de un enfoque multisectorial destinado a mejorar la salud y la nutrición a través del Plan Estratégico a Medio Plazo, consistente en la ampliación de módulos de intervenciones basados en pruebas. Dicha estrategia se basa en la Declaración Innocenti sobre la protección, la promoción y el apoyo del amamantamiento de 1990, en la Declaración Innocenti sobre la alimentación del lactante y el niño pequeño de 2005 y en la Estrategia mundial para la alimentación del lactante y del niño pequeño. Mediante estos esfuerzos, UNICEF reconoce los derechos de los niños, niñas y familias, incorporando actividades de eficacia demostrada para promover y apoyar las acciones de gobiernos y organizaciones no gubernamentales en tres ámbitos: el comunitario, el nacional y el de los sistemas sanitarios."

En cualquier caso esto es sólo un aspecto del abuso cometido en esta situación, lo más importante e indignante es la violación de los derechos humanos fundamentales de esta madre y de su hija, se han ignorado los más básicos y fundamentales, pero me gustaría en especial resaltar algunos de ellos

Articulo 16.3: La familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado.

Articulo 25.2. La maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencia especiales. Todos los niños, nacidos de matrimonio o fuera de matrimonio, tienen derecho a igual protección social.

Y en cuanto a los derechos del niño, queda claramente estipulado que:

Artículo 3
1. En todas las medidas concernientes a los niños que tomen las instituciones públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos legislativos, una consideración primordial a que se atenderá será el interés superior del niño.
2. Los Estados Partes se comprometen a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar, teniendo en cuenta los derechos y deberes de sus padres, tutores u otras personas responsables de él ante la ley y, con ese fin, tomarán todas las medidas legislativas y administrativas adecuadas.
3. Los Estados Partes se asegurarán de que las instituciones, servicios y establecimientos encargados del cuidado o la protección de los niños cumplan las normas establecidas por las autoridades competentes, especialmente en materia de seguridad, sanidad, número y competencia de su personal, así como en relación con la existencia de una supervisión adecuada.


No quiero ni tan siquiera aventurarme a pensar que esto pudiera ser un trato común o una práctica corriente en los centros de acogida o que ocurra a menudo con las madres o en especial con las madres extranjeras o musulmanas, o que esto sea un trato normal cuando uno carece de medios económicos o quién sabe, de idioma para defenderse... Prefiero creer que la separación, durante lo que ya son cinco días, de esta madre y su bebé, el abuso, atropello y la falta de humanidad inferidas en este caso, son un cúmulo de errores producto de una ignorancia e incompetencia extremas y les ruego por tanto que hagan cuanto esté en su mano para corregir esta vergonzosa situación.

Atentamente
Para más información:
OMS

AEP

Naciones Unidas
http://www2.ohchr.org/spanish/law/crc.htm


Atentamente,

(tu firma)



--------------------------------------------

Y aquí os copio la carta de la Dra.Ibone Olza en la que nos informaba via Facebook de lo sucedido:

Habiba es una joven madre de
Habiba es una joven madre de una niña de quince meses, a la que sigue amamantando. De origen marroquí y con unas circunstancias socioeconómicas adversas, hace cuatro meses aceptó vivir en una residencia para madres jóvenes de la Comunidad d...e Madrid, junto con su hija, con la esperanza de que así sería todo más sencillo.

Hace cuatro días y medio el Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF) decidió separar a la niña de la madre por no cumplir con los objetivos de una programa de psicoterapia y “habilidades maternales” que implica abandonar la lactancia materna a demanda y prolongada por considerarla “caótica” y “perjudicial para los niños y niñas”. Con estas consideraciones, todas carentes de base científica y legal, se obliga a las madres lactantes a tomar una medicación para que se le vaya retirando la leche.

Según la Asociación Española de Pediatría, la lactancia materna debe ser a demanda y puede prolongarse tanto como madre e hijo deseen. No se ha seguido procedimiento legal alguno para separar a esta madre de su hija, ni se ha permitido a la madre despedirse ni se le ha dicho a donde iría la niña, produciendo a ambas una grave indefensión. Habiba está con los pechos congestionados de leche, al borde de la mastitis, y con el corazón partido de dolor sin apenas dormir ni comer, angustiada por no poder estar junto a su hija. Esta madre ha sido valorada por una psicóloga y una psiquiatra y no presenta ningún indicio de enfermedad mental ni consumo de drogas ni nada que justificara ser víctima de semejante agresión.

A Habiba se le echó del centro a la calle en el mismo momento en el que se llevaron a su hija, diciéndole que ella ya no tenía plaza en ese lugar pues es un recurso para madres e hijos y ella ya no tiene hija. Una Fundación de ayuda humanitaria ha decidido amparar a esta madre dotándole de alojamiento y manutención, así como de apoyo jurídico.

Estamos profundamente consternados por el dolor de Habiba y nos duele imaginar en qué circunstancias estará la niña de 15 meses, separada de su madre, sometida a un destete abrupto, sin que probablemente nadie le haya explicado nada.

Consideramos el caso de Habiba y su hija como una gravísima violación de los Derechos Humanos y de los Derechos del Niño. El daño ya está hecho, pero si madre e hija se reúnen inmediatamente podrá ser reparado. Por todo ello os pedimos que escribáis urgentemente a la oficina del Defensor del Pueblo solicitando su rápida intervención y hagáis llegar vuestra protesta a la gerencia del Instituto Madrileño del Menor y la Familia, pidiéndole la inmediata entrega de la niña a su madre.

Podéis dirigir vuestras cartas:

• A la oficina del Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.es
fax: 913081158

• Dª Paloma Martín Martín.
Gerente
Instituto Madrileño del Menor y la Familia.
Calle Gran Via 14
28013 MADRID
immf@madrid.org

• Fundación Raíces: fundacionraices@telefonica.net
Portal de el Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.esaa niña de quince meses, a la que sigue amamantando. De origen marroquí y con unas circunstancias socioeconómicas adversas, hace cuatro meses aceptó vivir en una residencia para madres jóvenes de la Comunidad d...e Madrid, junto con su hija, con la esperanza de que así sería todo más sencillo.

Hace cuatro días y medio el Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF) decidió separar a la niña de la madre por no cumplir con los objetivos de una programa de psicoterapia y “habilidades maternales” que implica abandonar la lactancia materna a demanda y prolongada por considerarla “caótica” y “perjudicial para los niños y niñas”. Con estas consideraciones, todas carentes de base científica y legal, se obliga a las madres lactantes a tomar una medicación para que se le vaya retirando la leche.

Según la Asociación Española de Pediatría, la lactancia materna debe ser a demanda y puede prolongarse tanto como madre e hijo deseen. No se ha seguido procedimiento legal alguno para separar a esta madre de su hija, ni se ha permitido a la madre despedirse ni se le ha dicho a donde iría la niña, produciendo a ambas una grave indefensión. Habiba está con los pechos congestionados de leche, al borde de la mastitis, y con el corazón partido de dolor sin apenas dormir ni comer, angustiada por no poder estar junto a su hija. Esta madre ha sido valorada por una psicóloga y una psiquiatra y no presenta ningún indicio de enfermedad mental ni consumo de drogas ni nada que justificara ser víctima de semejante agresión.

A Habiba se le echó del centro a la calle en el mismo momento en el que se llevaron a su hija, diciéndole que ella ya no tenía plaza en ese lugar pues es un recurso para madres e hijos y ella ya no tiene hija. Una Fundación de ayuda humanitaria ha decidido amparar a esta madre dotándole de alojamiento y manutención, así como de apoyo jurídico.

Estamos profundamente consternados por el dolor de Habiba y nos duele imaginar en qué circunstancias estará la niña de 15 meses, separada de su madre, sometida a un destete abrupto, sin que probablemente nadie le haya explicado nada.

Consideramos el caso de Habiba y su hija como una gravísima violación de los Derechos Humanos y de los Derechos del Niño. El daño ya está hecho, pero si madre e hija se reúnen inmediatamente podrá ser reparado. Por todo ello os pedimos que escribáis urgentemente a la oficina del Defensor del Pueblo solicitando su rápida intervención y hagáis llegar vuestra protesta a la gerencia del Instituto Madrileño del Menor y la Familia, pidiéndole la inmediata entrega de la niña a su madre.

Podéis dirigir vuestras cartas:

• A la oficina del Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.es
fax: 913081158

• Dª Paloma Martín Martín.
Gerente
Instituto Madrileño del Menor y la Familia.
Calle Gran Via 14
28013 MADRID
immf@madrid.org

• Fundación Raíces: fundacionraices@telefonica.net
Portal de el Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.es




¿Y qué más se puede hacer?

Podeís firmar la petición que aparece a la derecha y/o uniros al grupo de apoyo en Facebook:
http://www.facebook.com/#!/home.php?sk=group_170685046326633

Habiba es una joven madre de una niña de quince meses, a la que sigue amamantando. De origen marroquí y con unas circunstancias socioeconómicas adversas, hace cuatro meses aceptó vivir en una residencia para madres jóvenes de la Comunidad d...e Madrid, junto con su hija, con la esperanza de que así sería todo más sencillo.

Hace cuatro días y medio el Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF) decidió separar a la niña de la madre por no cumplir con los objetivos de una programa de psicoterapia y “habilidades maternales” que implica abandonar la lactancia materna a demanda y prolongada por considerarla “caótica” y “perjudicial para los niños y niñas”. Con estas consideraciones, todas carentes de base científica y legal, se obliga a las madres lactantes a tomar una medicación para que se le vaya retirando la leche.

Según la Asociación Española de Pediatría, la lactancia materna debe ser a demanda y puede prolongarse tanto como madre e hijo deseen. No se ha seguido procedimiento legal alguno para separar a esta madre de su hija, ni se ha permitido a la madre despedirse ni se le ha dicho a donde iría la niña, produciendo a ambas una grave indefensión. Habiba está con los pechos congestionados de leche, al borde de la mastitis, y con el corazón partido de dolor sin apenas dormir ni comer, angustiada por no poder estar junto a su hija. Esta madre ha sido valorada por una psicóloga y una psiquiatra y no presenta ningún indicio de enfermedad mental ni consumo de drogas ni nada que justificara ser víctima de semejante agresión.

A Habiba se le echó del centro a la calle en el mismo momento en el que se llevaron a su hija, diciéndole que ella ya no tenía plaza en ese lugar pues es un recurso para madres e hijos y ella ya no tiene hija. Una Fundación de ayuda humanitaria ha decidido amparar a esta madre dotándole de alojamiento y manutención, así como de apoyo jurídico.

Estamos profundamente consternados por el dolor de Habiba y nos duele imaginar en qué circunstancias estará la niña de 15 meses, separada de su madre, sometida a un destete abrupto, sin que probablemente nadie le haya explicado nada.

Consideramos el caso de Habiba y su hija como una gravísima violación de los Derechos Humanos y de los Derechos del Niño. El daño ya está hecho, pero si madre e hija se reúnen inmediatamente podrá ser reparado. Por todo ello os pedimos que escribáis urgentemente a la oficina del Defensor del Pueblo solicitando su rápida intervención y hagáis llegar vuestra protesta a la gerencia del Instituto Madrileño del Menor y la Familia, pidiéndole la inmediata entrega de la niña a su madre.

Podéis dirigir vuestras cartas:

• A la oficina del Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.es
fax: 913081158

• Dª Paloma Martín Martín.
Gerente
Instituto Madrileño del Menor y la Familia.
Calle Gran Via 14
28013 MADRID
immf@madrid.org

• Fundación Raíces: fundacionraices@telefonica.net
Portal de el Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.esa denuncia de malos tratos y una cuestión de genero

Qué ocurre cuando el mal trato y el abuso proviene de una institución. Este es el caso sufrido por Habiba una madre marroquí y su bebé de quince meses ambos han sido separados mientras se encontraban bajo el amparo del Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF).

En un principio se les impuso la interrupción de la lactancia yendo así contra las recomendaciones de la OMS y Asociación Española de Pediatría y tras apartar a esta madre de su bebé sin decirle a donde iba ni darle tiempo a despedirse se la echó de dicho centro por no ser madre con un hijo.
Venga de donde venga este trato, es secuestro, es abuso y es tortura. Privar a una madre y a un bebé del contacto físico, de la lactancia establecida y el amor me parece uno de los más aberrantes e inhumanos tratos que cualquier ser humano pueda padecer, sabemos lo suficiente sobre las necesidades físicas y afectivas de los bebés y del vinculo materno filial y su impacto en la salud física y mental como para entender que lo que Habiba y su bebé experimentan es denunciable y necesita ser corregido con urgencia.
La última vez que oí algo comparable había ocurrido en los campos de exterminio durante la Segunda Guerra Mundial. Esto ha ocurrido en Madrid, en democracia y en el 2011.
El miedo no existe cuando una madre te acompaña, y Habiba y su hija tendrán tantas como hagan falta hasta que por fin se vuelvan a encontrar.

Todas las madres somos Habiba.

Por favor únete, no calles ante la injusticia.

Puedes copiar esta carta o escribir tu propia queja y enviarla a las direcciones que se citan al pie de la misma. Gracias.
Habiba es una joven madre de una niña de quince meses, a la que sigue amamantando. De origen marroquí y con unas circunstancias socioeconómicas adversas, hace cuatro meses aceptó vivir en una residencia para madres jóvenes de la Comunidad d...e Madrid, junto con su hija, con la esperanza de que así sería todo más sencillo.

Hace cuatro días y medio el Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF) decidió separar a la niña de la madre por no cumplir con los objetivos de una programa de psicoterapia y “habilidades maternales” que implica abandonar la lactancia materna a demanda y prolongada por considerarla “caótica” y “perjudicial para los niños y niñas”. Con estas consideraciones, todas carentes de base científica y legal, se obliga a las madres lactantes a tomar una medicación para que se le vaya retirando la leche.

Según la Asociación Española de Pediatría, la lactancia materna debe ser a demanda y puede prolongarse tanto como madre e hijo deseen. No se ha seguido procedimiento legal alguno para separar a esta madre de su hija, ni se ha permitido a la madre despedirse ni se le ha dicho a donde iría la niña, produciendo a ambas una grave indefensión. Habiba está con los pechos congestionados de leche, al borde de la mastitis, y con el corazón partido de dolor sin apenas dormir ni comer, angustiada por no poder estar junto a su hija. Esta madre ha sido valorada por una psicóloga y una psiquiatra y no presenta ningún indicio de enfermedad mental ni consumo de drogas ni nada que justificara ser víctima de semejante agresión.

A Habiba se le echó del centro a la calle en el mismo momento en el que se llevaron a su hija, diciéndole que ella ya no tenía plaza en ese lugar pues es un recurso para madres e hijos y ella ya no tiene hija. Una Fundación de ayuda humanitaria ha decidido amparar a esta madre dotándole de alojamiento y manutención, así como de apoyo jurídico.

Estamos profundamente consternados por el dolor de Habiba y nos duele imaginar en qué circunstancias estará la niña de 15 meses, separada de su madre, sometida a un destete abrupto, sin que probablemente nadie le haya explicado nada.

Consideramos el caso de Habiba y su hija como una gravísima violación de los Derechos Humanos y de los Derechos del Niño. El daño ya está hecho, pero si madre e hija se reúnen inmediatamente podrá ser reparado. Por todo ello os pedimos que escribáis urgentemente a la oficina del Defensor del Pueblo solicitando su rápida intervención y hagáis llegar vuestra protesta a la gerencia del Instituto Madrileño del Menor y la Familia, pidiéndole la inmediata entrega de la niña a su madre.

Podéis dirigir vuestras cartas:

• A la oficina del Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.es
fax: 913081158

• Dª Paloma Martín Martín.
Gerente
Instituto Madrileño del Menor y la Familia.
Calle Gran Via 14
28013 MADRID
immf@madrid.org

• Fundación Raíces: fundacionraices@telefonica.net
Portal de el Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.es
Una denuncia de malos tratos y una cuestión de genero


Qué ocurre cuando el mal trato y el abuso proviene de una institución. Este es el caso sufrido por Habiba una madre marroquí y su bebé de quince meses ambos han sido separados mientras se encontraban bajo el amparo del Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF).

En un principio se les impuso la interrupción de la lactancia yendo así contra las recomendaciones de la OMS y Asociación Española de Pediatría y tras apartar a esta madre de su bebé sin decirle a donde iba ni darle tiempo a despedirse se la echó de dicho centro por no ser madre con un hijo.
Venga de donde venga este trato, es secuestro, es abuso y es tortura. Privar a una madre y a un bebé del contacto físico, de la lactancia establecida y el amor me parece uno de los más aberrantes e inhumanos tratos que cualquier ser humano pueda padecer, sabemos lo suficiente sobre las necesidades físicas y afectivas de los bebés y del vinculo materno filial y su impacto en la salud física y mental como para entender que lo que Habiba y su bebé experimentan es denunciable y necesita ser corregido con urgencia.
La última vez que oí algo comparable había ocurrido en los campos de exterminio durante la Segunda Guerra Mundial. Esto ha ocurrido en Madrid, en democracia y en el 2011.
El miedo no existe cuando una madre te acompaña, y Habiba y su hija tendrán tantas como hagan falta hasta que por fin se vuelvan a encontrar.

Todas las madres somos Habiba.

Por favor únete, no calles ante la injusticia.

Puedes copiar esta carta o escribir tu propia queja y enviarla a las direcciones que se citan al pie de la misma. Gracias.
Habiba es una joven madre de una niña de quince meses, a la que sigue amamantando. De origen marroquí y con unas circunstancias socioeconómicas adversas, hace cuatro meses aceptó vivir en una residencia para madres jóvenes de la Comunidad d...e Madrid, junto con su hija, con la esperanza de que así sería todo más sencillo.

Hace cuatro días y medio el Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF) decidió separar a la niña de la madre por no cumplir con los objetivos de una programa de psicoterapia y “habilidades maternales” que implica abandonar la lactancia materna a demanda y prolongada por considerarla “caótica” y “perjudicial para los niños y niñas”. Con estas consideraciones, todas carentes de base científica y legal, se obliga a las madres lactantes a tomar una medicación para que se le vaya retirando la leche.

Según la Asociación Española de Pediatría, la lactancia materna debe ser a demanda y puede prolongarse tanto como madre e hijo deseen. No se ha seguido procedimiento legal alguno para separar a esta madre de su hija, ni se ha permitido a la madre despedirse ni se le ha dicho a donde iría la niña, produciendo a ambas una grave indefensión. Habiba está con los pechos congestionados de leche, al borde de la mastitis, y con el corazón partido de dolor sin apenas dormir ni comer, angustiada por no poder estar junto a su hija. Esta madre ha sido valorada por una psicóloga y una psiquiatra y no presenta ningún indicio de enfermedad mental ni consumo de drogas ni nada que justificara ser víctima de semejante agresión.

A Habiba se le echó del centro a la calle en el mismo momento en el que se llevaron a su hija, diciéndole que ella ya no tenía plaza en ese lugar pues es un recurso para madres e hijos y ella ya no tiene hija. Una Fundación de ayuda humanitaria ha decidido amparar a esta madre dotándole de alojamiento y manutención, así como de apoyo jurídico.

Estamos profundamente consternados por el dolor de Habiba y nos duele imaginar en qué circunstancias estará la niña de 15 meses, separada de su madre, sometida a un destete abrupto, sin que probablemente nadie le haya explicado nada.

Consideramos el caso de Habiba y su hija como una gravísima violación de los Derechos Humanos y de los Derechos del Niño. El daño ya está hecho, pero si madre e hija se reúnen inmediatamente podrá ser reparado. Por todo ello os pedimos que escribáis urgentemente a la oficina del Defensor del Pueblo solicitando su rápida intervención y hagáis llegar vuestra protesta a la gerencia del Instituto Madrileño del Menor y la Familia, pidiéndole la inmediata entrega de la niña a su madre.

Podéis dirigir vuestras cartas:

• A la oficina del Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.es
fax: 913081158

• Dª Paloma Martín Martín.
Gerente
Instituto Madrileño del Menor y la Familia.
Calle Gran Via 14
28013 MADRID
immf@madrid.org

• Fundación Raíces: fundacionraices@telefonica.net
Portal de el Defensor del Pueblo
www.defensordelpueblo.es

Popular posts from this blog

De fines de año, Guerras de las Galaxias y otros apocalispsis patriarcales

En este día en tierra de nadie que es el 30 de diciembre, cuando me doy cuenta de que me he asignado el trabajo de preparar la fiesta de fin de año (mi pareja se encargó del 25) y de que como siempre me he pasado, que si tarta de chocolate por hacer, huevos rellenos, uvas para la fiesta, solucionar la conexión vía iPad desde casa de los vecinos para las uvas (y encargarme de entrenar a los escoceses que no conocen la tradición) y por qué no Jesusa haz tu primera queimada ya que estás y ahora que os escribo me acuerdo de sacar la pata de cordero del congelador...En fin, pues sí en este día, escucho a mi marido comprar las entradas para ver Star Wars y grito: "¡yo también voy!" He decidido así de sopetón que no me quiero perder la cara de Anaïs que a sus 4 años y medio va por primera vez al cine, prefiero ignorar irresponsablemente mis responsabilidades a no estar en ese momento. Mis hijos mayores me informan diligentes que la película pasa el test de Bechdel.               

La salud

Veo que los humanos y humanas caemos en la repetición de nuestros errores con cierta facilidad. Y bueno en realidad la naturaleza también tiene tendencia a la repetición. Y aunque la repetición y mutación suelan darse en la persecución de perfeccionamiento o de alternativas más interesantes, a veces esto lleva a cosas tan terribles como el virus que nos somete ahora a todo tipo de adaptaciones forzadas y forzosas, que sobrellevamos como buenamente podemos y en función de nuestras circunstancias. Las mías como madre unschooler (mis hijos no están escolarizados) residente en Londres, no son las peores. Y desde aquí contemplo al que fuera mi país, desde la ventana virtual que me ofrecen mis amplias redes sociales y compruebo con mucha angustia la aplicación de algunas medidas llevadas a cabo en estos días extraños. Antes de nada me gustaría decir que voy a intentar ser prudente, porque si algo sé en estas circunstancias es que no sé nada y también que me alegro de no ser ninguna de las

Hoy es el día de la madre en Reino Unido y quiero problemas

Hoy es el día de la madre en Reino Unido y me he despertado y lo he recordado por la prensa y he llorado sola desayunando y pensando en lo mucho que me irrita el día de la madre y sus estereotipos, y he sabido que mis hijos se habrían olvidado porque andamos todos perdidos y preocupados. Y he echado de menos irritarme por cosas como esas. Quiero volver a tener el privilegio de discutir sobre feminismo. Y poder enfadarme con mi marido por la tapa del water.  Quiero que me enfade la falta de civismo en la calle. Y quiero preocuparme por lo que vamos a hacer la semana que viene.  Quiero irritarme con la gente que quiero, quiero debatir con mis amigas quien paga la cuenta del restaurante. Quiero exasperarme porque no conseguimos quedar y que nos cuadre a todas. Quiero tener que pasar una hora calmando a mi hijo adolescente cuando se enfada con sus amigos. Quiero salir a la calle a curar una rodilla porque mi hija se ha caído. Quiero besar y abrazar como si no hubiese un